El fútbol, ese deporte, espectáculo, o reality show que mueve el mundo en estos días con mas fuerza que el dinero.
Nos llaman desde todos lados, nos hablan de Paul, de Villa y de otros personajes importantes en este mundial de Sudáfrica 2010, y los pseudopensadores televisivos salen por ahí diciendo que "somos las ovejas del rebaño, que nos llevan a donde quieren", yo al menos elegí que me controlaran con el fútbol, mucho mejor que salir en una cadena diciendo eso y que tras la publicidad se nos meta una previa de 200 horas para el partido que paga a la cadena que te paga tí por decir eso.
Ahora en la final y todos inexplicablemente felices, no solo por lo que vemos (una GRAN ESPAÑA y un GRAN JUEGO), sino por que somos conscientes de que dentro de 15 años se lo contaremos a nuestros hijos y dentro de mas a nuestros nietos, y en las rondas cerveceras con los amigos en un futuro se contarán anécdotas de lo que hacías el día del partido, de cómo lo viste, de cómo lo sentiste, de que te tiraste a una fuente,...
Así que "filósofo de pacotilla" sigue riéndote de mí por ser una oveja, pero yo me reiré de tí cuando ría o cuando llore, porque sabré que aunque oveja, tendré sentimientos fuertes por cosas, que como el fútbol, no se pueden explicar con la lógica.
